Un homenaje de ostras y champán en el recién abierto THE KISS BY KLIMT

1 mayo, 2012122

Los amantes del champán, las ostras y los caprichos gourmet de alta gama tiene una nueva parada obligada: THE KISS BY KLIMT, una ostrería de diseño que acaba de abrir sus puertas en la Capital y está dedicada a los productos franceses de primera calidad. Y cómo no, las estrellas indiscutibles de su carta son las ostras, el champán, el foie, el caviar… los placeres gastronómicos más lujosos del país galo. Una apuesta deliciosa que causará sensación entre los paladares más sibaritas.

En la zona financiera de la Capital de España acaba de abrir sus puertas THE KISS BY KLIMT, un establecimiento decorado con un gusto extraordinario que nace bajo el concepto de Oyster and Champagne Bar. Su interior tiene un profundo y exquisito sabor francés y brinda la oportunidad de saborear unas ostras regadas con champán y, después, rematar la velada con cualquiera de los gin tonics o combinados perfect serve que se sirven en el Gim Club Premium Bar KLIMT, que se encuentra situado justo en el local contiguo.

El champán es uno de los productos estrella de su carta y está representado por los mejores champanes del mundo entre los que destacan las mejores referencias de la casa G. H. Mumm (Cordon Rouge, Brut Rosé, Mumm de Cremant y Cuvée R. Lalou), Dom Perignon, Krug, Laurent Perrier y un largo etcétera. A estos caldos chispeantes se suman también una lista de vinos blancos tan cotizados como Tokaji, de Hungría, y Petit Chabil, de Francia, que armonizan estupendamente con las delicatesen que componen la parte gastronómica de la oferta.

El segundo de los puntos fuertes de The KISS by Klimt son las ostras (Gillardeau nº 3, Huîtres Specials nº 2, Huîtres Specials nº 3, Belón nº 2 y Belón nº 3), que se pueden pedir por 3, 6 y 12 unidades.

Pero estos no son los únicos bocados exquisitos que se pueden degustar en este establecimiento, también es posible degustar: foie artesanal, caviar, Zërep de esturión (francés) y de salmón salvaje de Kamtchatka (ruso) y una selección de ahumados de Carpier que se sirven en unas pequeñas tostas que son denominadas “besos”.