Es el fruto que da el ciruelo, las hay de varios colores y tamaños, según el árbol que las produce. Su carne es jugosa y dulce, en el centro un hueso duro que al abrirlo alberga una almendra amarga.
En latín es conocida como cereola, abreviatura de cereola pruna, que quiere decir ciruela de color de cera. Ya eran cultivadas en la prehistoria en algunos países de ahí que su origen sea un poco incierto. En la época de los romanos ya se conocían más de 300 variedades de ciruelas distintas, pero en la actualidad hay hasta 2000. A la hora de elegirlas en el mercado se debe tener en cuenta que tengan la piel brillante y con un olor perfumado. También hay que evitar las demasiadas duras, por verdes o las excesivamente blandas.
Un potente laxante
Poseen un alto contenido en fibra por eso las ciruelas secas o pasas si se ponen a remojo durante todo la noche, son una de las mejores maneras para comenzar el día. En ayunas, antes del desayuno hay que tomarlas, de esta manera se vence al estreñimiento de manera natural. Al ser tan naturales se les puede dar incluso a los más pequeños de la casa, mezcladas con yogur o con naranja.
Evitan deshidrataciones
Casi la mayor parte de su contenido es agua, por esta razón es un alimento ideal para tomar en los días calurosos y evitar cualquier posibilidad de deshidratación, por ejemplo puede ser fantástica para llevar durante un día de excursión. Son estupendas para llevar en una bolsita a la playa o a la piscina, podrás disfrutar de ellas en cualquier momento sin tener miedo al sol.
Estimula el sistema nervioso
La ciruela tiene un gran contenido en vitamina A, resultando muy adecuada para aumentar la energía que nuestro organismo necesita, sobre todo en los estados carenciales o de mayor desgaste, como en la época de éxamenes.
Ayuda a eliminar líquidos
Como hemos comentado las ciruelas son extraordinarias para acudir al lavabo, ayuda a eliminar líquidos por la orina, sobre todo los que ayudan a acumular los líquidos que obstaculizan la circulación de la sangre. Lo mejor es incluirlas en el desayuno y a media tarde consiguiendo muy buenos resultados.
No las mezcles con verduras
Hay ciertas frutas que por su contenido es mejor no mezclarlas en la misma comida en la que hayamos incluido verduras, quizá por eso se aconseja que fruta se tome fuera de las principales comidas. Lo que podría ocurrir es una gran aparición de gases y para detener o hacer más pesado el proceso de la digestión.
MASCARILLA PIEL MIXTA
Se prepara a base de ciruelas ácidas y media cuchara de aceite de oliva, prepara una mezcla licuada y déjala que actúe durante 20 minutos en el rostro. Después sólo queda enjuagar y listo.
Consulta siempre al médico antes de seguir cualquiera de estos consejos por si en tu caso específico no es conveniente que lo hagas.