Es originario de México, Bolivia y Perú. Llegó a España en 1493, lo trajo Colón en su primer viaje a América. Los indígenas americanos lo llaman chili, pero los españoles y los portugueses, lo llaman pimientos. Se comenzaron a cultivar aquí a partir del siglo XVI. El pimiento pertenece a la familia de las Solanáceas, de las que existen más de 2.300 especies y a ellas pertenecen también el tomate y la berenjena.
Los hay verdes, amarillos y rojos, dependiendo de su color, varían en cuanto a su sabor, más suave o más fuerte. Los rojos son además una importante fuente de vitamina C, curiosamente superando incluso a la naranja, al pomelo y al limón.
Especial artrosis y problemas de huesos
Está muy indicado para todos los procesos reumáticos y todo tipo de padecimientos de huesos de origen artrítico. Para algunas personas, el pimiento puede resultar un tanto indigesto de tomar, procura comerlo por las mañanas y en las comidas, evítalo si puedes por la noche. Resulta también estupendo para todos aquellos que sufren problemas de gota.
Limpia el hígado y la vesícula
El pimiento hace que sea mucho más sencillo el correcto funcionamiento del hígado, estimulándolo y tonificándolo. Si tienes problemas con tu hígado o vesícula, prueba a tomar el caldo de cocción del pimiento en ayunas. Además ayuda también a las personas que no tengan ganas de comer, para ayudar a que tengan apetito de una manera totalmente natural.
Fuera granos y manchas en la piel
El pimiento, mezclado con zumo de limón y pepino, todo ello bien pasado por la batidora o licuadora, conseguirá aclarar poco a poco las manchas de la piel, pero también a secar y eliminar los molestos granitos que puedan aparecer. Es estupendo para utilizarlo los jóvenes como método natural durante la adolescencia, con el temido acné. Como curiosidad os contaré que esta misma mezcla se puede tomar para hacer gárgaras cuando duela la garganta.
Piernas más ligeras
Para las personas que tengan problemas circulatorios, en concreto pesadez de piernas, el pimiento es un alimento extraordinario que deberían incluir en su dieta habitual. Sus vitaminas P y K, alivian los problemas de coagulación y sobre todo esa tirantez que se sufre al final de una dura jornada en las piernas.
Guerra a la hipertensión
Su alto contenido en vitamina P, cuya virtud más importante es la de combatir la hipertensión y fortalecer los capilares venosos. También podremos conseguir que la tensión se controle y se mantenga sin altibajos bruscos. Además al poseer el doble de vitamina C que los cítricos, ayuda a eliminar los lípidos de la sangre y hace verdaderos milagros contra la arteriosclerosis.
Ayuda a que el intestino trabaje
Su sabroso sabor nos permite tomarlo directamente crudo en ensaladas. Contiene clorofila y su principal función es hacer posible que el intestino se regularice de manera natural y correcta, pudiendo acudir al baño a diario y sin esfuerzos.
EN BELLEZA ESTIMULA EL CUERO CABELLUDO
Si maceramos durante una semana entera 15 gr. de pimiento maduro en medio litro de alcohol de 60º, tendremos un estupendo tónico.
Después deberás filtrar el líquido con una tela fina y ya estaré lista la loción para tu cabello. Se utiliza masajeando y ayuda a estimular el cuero cabelludo y evitar la caída.
Consulta siempre al médico antes de seguir cualquiera de estos consejos por si en tu caso específico no es conveniente que lo hagas.