La limpieza de la olla debe de realizarse con agua y jabón. Para dejar la válvula impecable debes sumergirla en agua y amoniaco o hacerlo con algún producto antigrasa. Ojo, cuando estés cocinando y notes que el vapor sale por las ranuras, es la señal de que la junta está mal puesta. Recuerda que es muy importante que la junta de la tapadera esté bien colocada y que debe quedar tensa para que cierre herméticamente la olla.