Atrás empieza a quedar ya la frialdad y la sencillez del minimalismo, la tendencia del verano es el cottage, un estilo inglés clásico rural.
Colores naturales y elementos tradicionales junto con objetos vintage, que van a juego con los tonos de la estancia.
Un estilo mucho más romántico, comienza a decirse adiós al blanco y negro que reinaba en el estilo minimalista, para dar paso al estilo cottage, lleno de color, romanticismo y piezas únicas.
Proviene de las casas de campo inglesas, con el gusto por lo antiguo, cuidando mucho los detalles. El significado de cottage, es más o menos “lugar donde se descansa en la campiña”, de ahí su estilo acogedor, bucólico y elegante. Cualquier espacio sobrio puede terminar convirtiéndose en una estancia acogedora, personalizando cada detalle.
Luxmader ha creado esta nueva tendencia, la colección “Elle Deco”, en maderas nobles y tonos crema que encajan maravillosamente. Cada cortina se fabrica de manera artesanal, por lo que cada pieza es única y exclusiva. Surgen tonos rosa pálido y blanco, en definitiva colores pastel, aunque la colección de la firma valenciana muestra diez tonos diferentes.
Mezcla de estilos, muebles antiguos, toques únicos y exclusivos, con muebles de madera de estilo colonial, biombos de mimbre, lámparas de araña, cortinas pastel y una armonía total de colores.
Para los dormitorios, optan por muebles blancos de líneas simples, con cabeceros tapizados, mesillas y algún mueble auxiliar en tonos pastel. Una buena opción es empapelar las paredes con diseños florares. Se utiliza mucho la decoración en hierro forjado para lámparas de techo y mesas adornadas con jarrones de cerámica.