¿Cuántas veces has discutido con tus compañeros de trabajo porque el aire acondicionado o la calefacción de la oficina están demasiado altos? Nunca hace una temperatura a gusto de todos y esto suele generar más de un conflicto laboral… Siempre hay alguien que aprovecha el paseo al cuarto de baño o al momento del café para subir o bajar el termostato, lo que es una causa segura de discusiones. Pues bien, una pulsera va a terminar con todos estos males. Así es. WRISTIFY es una pulsera termoeléctrica desarrollada por ingenieros del MIT (Massachusetts Institute of Technology) que permite regular la temperatura de la persona que la lleva haciendo que su cuerpo esté siempre a la temperatura ideal. ¡Menudo invento!
WRISTIFY es un invento revolucionario que consigue regular la temperatura corporal sometiendo la piel a pulsos fríos o calientes que hacen que el cuerpo esté siempre a una temperatura agradable.
Sam Shames, un veterano del MIT que ayudó a inventar esta tecnología, comentaba que el cuerpo humano y la piel no son como un termómetro. Si ponemos algo frío directamente en el cuerpo a temperatura constante, este se aclimata y deja de percibirlo como frío. Shames descubrió que la introducción continua de pequeños impulsos fríos hace que el cuerpo piense que hace frío. Y eso es precisamente lo que hace Wristify. Esta pulsera lanza impulsos termoeléctricos y es capaz de calentar o enfriar la superficie de la misma que está en contacto con nuestra piel a un ritmo de 0,4ºC por segundo.
De momento, este dispositivo es bastante tosco, pero sus componentes son muy baratos (unos 50 dólares en total) y parece que miniaturizarlo todo de forma adecuada no será un gran problema. Si logran resolver estos problemas puede que consigan una verdadera revolución en la gestión de la temperatura.