¿Sabías que un 70 % de las mujeres sufre durante el embarazo un cambio hormonal que puede llegar a producir mal aliento, gingivitis, caries o sensibilizar las encías hasta llegar a sangrar? Y no sólo eso, ya dicen que cada embarazo es un diente.
Clinicas Smildon nos cuenta 9 cosas que seguramente no sabías que pueden ocurrirte en los dientes durante el embarazo:
- Como consecuencia del ardor de estómago, las malas digestiones, los vómitos o los cambios en la composición de la saliva es muy posible tener mal aliento durante la gestación.
- Si eres de las que está sufriendo vómitos durante el embarazo, estos provocan una erosión del esmalte de sus dientes , haciéndolo más sensible a las caries.
- Las embarazadas suelen tener muchos antojos. Los dulces y los azúcares están muy presentes en ellos, por lo que aumenta el riesgo de sufrir caries. El «mal del azúcar» que suele afectar a los más peques también les toca a las mujeres embarazadas.
- Lo ideal para las futuras madres es que mantengan una dieta equilibrada y una buena higiene bucal, para que no se produzca un desperfecto de su placa bacteriana. No olvides nunca cepillar tus dientes tras cada comida y usar hilo dental al menos una vez al día.
- Debido a los cambios hormonales si eres tendente a sufrir gingivitis sus síntomas pueden acentuarse debido a los cambios hormonales que sufre tu cuerpo. Dolor, inflamación o un sangrado son los principales síntomas de esta enfermedad.
- El bebé obtiene el calcio que necesita de los alimentos y los huesos de la madre, nunca de sus dientes. Aún así no pierdas de vista el consumo de calcio.
- Aunque se ha de tener especial cuidado en el primer trimestre de gestación, ir al dentista durante el embarazo no constituye ningún tipo de peligro ni para el bebé ni para la futura mamá.
- En el primer trimestre, la embarazada puede sufrir sequedad en la boca o exceso de salivación, aunque resulta poco probable.
- Tomando las precauciones oportunas se puede hacer una placa dental durante el embarazado. Aunque siempre debes usar un delantal del plomo, ya que de esta manera tu bebé estará protegido y no correrá ningún tipo de peligro.
Siempre que sea posible puedes esperar a ir al dentista tras dar a luz o incluso tras la lactancia. Pero en caso de necesidad no dejes de ir aunque estés embarazada, es peor una infección que un empaste o una extracción.