Aunque el smoothie se inventó en los años 30 en la costa oeste de Estados Unidos, es ahora cuando este cóctel de frutas heladas se ha convertido en el refresco preferido de todo el mundo, especialmente cuando los termómetros se disparan. David Monzón, del gastrobar madrileño Bendita Locura Coffee & Dreams, donde los preparan a diario desde hace años, nos cuenta todos los secretos para conseguir el smoothie perfecto.
Vitaminas por un tubo
Cuando se le pregunta a David qué es realmente un smoothie no se sorprende, más bien hace una reflexión indicando que se trata de una pregunta complicada “sobre todo si se tiene en cuenta que actualmente a casi cualquier combinación de frutas se le llama smoothie. Hace tiempo sólo se consideraban como tales los que se preparaban con frutas y/o verduras con algún elemento cremoso (de ahí el nombre, smooth que significa suave en inglés). Se podía añadir leche, yogur, nata, helado, leche de soja, almendras, arroz… para darle esa densidad tan característica. Pero desde hace un tiempo también se preparan con zumos, agua o hielo y caldos, así que podemos decir que la receta ha evolucionado y ya los límites entre el smoothie y el zumo no están tan claros”.
¿Cómo se preparan? “Se trata de un proceso muy sencillo que se puede realizar de muy diferentes formas y con multitud de ingredientes. Una buena forma consiste en batir la fruta o frutas que hayamos elegido y añadirle luego el elemento lácteo muy frío, hasta que se consiga una mezcla homogénea y de una consistencia densa y suave. Al final también podemos añadirle algún fruto seco picado o alguna semilla para darle un toque. En Bendita Locura los preparamos de tres sabores clásicos: fresa, mango y kiwi. Son sabores delicados y refrescantes que quedan perfectos en este tipo de preparados. Es importante servirlos siempre fríos y beberlos en el momento para que no pierdan textura. Tampoco recomendamos añadirles hielo cuando ya está servido porque la bebida perderá sabor y consistencia” – añade David.
Es fundamental que se preparen con ingredientes de calidad que se encuentren en el momento óptimo de maduración, porque eso se transmite en el resultado final. Al tratarse de un producto con tan escasa elaboración, la materia prima es primordial. Pero además de preocuparnos por su sabor, es también imprescindible cuidar la presentación y la forma de servirlo. Los recipientes de cristal son perfectos para este tipo de bebidas que se consumen tanto con ojos como con el paladar, y poder ver el color y la textura de un único golpe de vista lo hace aún más apetecible.
C/Príncipe de Vergara, 73. Madrid.
Tel. +34 91 563 25 70
Horario: Lunes de 8:30 a 17:00 – Mar – Jue. de 8:30 a 17:00 – Viernes de 8:30 a 01:30 – Sábado de 9:30 a 01:30 – Domingo de 9:30 a 17:00.
Precio medio: 20 € · Plato del 10,50 € con bebida y café