No hay que ponerse dramática, pero lo cierto es la tensión hay que tenerla más en cuenta. Según la Organización Mundial de la Salud, cada año fallecen 9,4 millones de personas en el mundo por complicaciones derivadas de una elevada tensión arterial.
El pasado 17 de mayo se celebró el Día Mundial de la Hipertensión, con un mensaje muy directo: “Sigue el ritmo de tu salud”. Lo más curioso es que hay muchísimas personas que tienen la tensión alta y lo desconocen. En ocasiones los síntomas pueden pasar totalmente desapercibidos para la persona que lo padece, sobre todo si aparentemente no tiene problemas de salud y no se realiza controles regularmente.
En España según el estudio Di@abet.es, se calcula que el 42,6% de la población adulta es hipertensa. Se podría decir que la hipertensión es una epidemia silenciosa. Las arterias están sometidas a una tensión más alta de lo recomendable, la sangre ejerce más presión de la normal entre las paredes de los vasos sanguíneos y esto obliga al corazón a bombear con más fuerza provocando un desgaste.
Afecta sobre todo a personas mayores de 40 años y personas con antecedentes familiares, pero puede manifestarse en cualquier momento de nuestra vida. Lo mejor es mantener el control de nuestra tensión, esto podrá ahorrarnos tener complicaciones con nuestra salud más severas, como un infarto de miocardio o un ictus.
¿Qué alimentos me ayudan a bajar mi tensión?
-Es muy importante incluir en nuestra dieta alimentos que aporten minerales como el potasio (plátano, patatas y tomates), ayudan también a regular el riñón eliminando agua y por tanto bajando la tensión.
-También la dieta debe tener los niveles de calcio adecuados, consumir alimentos ricos en calcio como (lácteos, legumbres, brécol y almendras), que contribuyen también a mejorar la calidad de las paredes arteriales.
¿Y qué debo eliminar o reducir de mi dieta?
Lo primero que te dirá cualquier especialista es que el mayor enemigo es la sal, así que disminuye el consumo de sal y de alimentos salados, producen que ya poseen un exceso de sal de base sin añadirles nada como: embutidos, frutos secos, ahumados, encurtidos, conservas en salazón, platos precocinados, quesos curados, keptchup, snacks y los caldos concentrados en pastillas.
Si a partir de aquí tus comidas te resultan demasiado aburridas e insípidas, puedes probar aderezándolas con pimienta, azafrán, curry, canela o mostaza siempre y cuando no lleve sal. Además de las hierbas aromáticas como albahaca, comino, laurel, perejil, romero, tomillo…
Más ejercicio y menos estrés
Hay que practicar ejercicio moderado, pero es indispensable caminar, intenta al menos de 30 a 40 minutos diarios, no hace falta ir rápido tipo maratón, simplemente caminar a buen paso y constante.
Muy importante también es reducir los niveles de estrés, en ocasiones estamos sometidos a mucha presión para lo que no hay nada más recomendable que practicar alguna técnica de relajación, por ejemplo el yoga sería estupendo.