El verano es la temporada estrella de bronceado, de calor, de noches eternas, de playa… no habría que apuntar más para apresurarse a asegurar que es la época preferida por muchos, pero también es la estación en la que se disparan los casos (no tan apetecibles) de cistitis, una infección urinaria que afecta especialmente a las mujeres y cuyos síntomas más habituales son las ganas constantes de orinar y el escozor. Es más frecuente durante el estío porque la humedad de los bañadores o el agua fría favorecen su aparición, así como por el aumento de las relaciones sexuales; todos estos factores alteran la flora regional y sus mecanismos de defensa. La Unidad del Suelo Pélvico by Rozalén, nos da los consejos y recomendaciones para evitar esta molesta infección.
- Higiene correcta. Hay que lavar los genitales desde la zona anterior a la posterior para evitar que los gérmenes localizados en el área anal lleguen a la uretra. Se desaconseja el uso de jabones que pueden ser irritantes y contraproducentes, para ello, geles específicos o neutros, acorde al PH de cada usuaria..
- Cambios de bañador. Hay que evitar permanecer mucho tiempo con el mismo bañador porque parece que la humedad facilita la proliferación de bacterias, como la Escherichia coli, responsable más frecuente de la cistitis, aunque existe cierta controversia. Es recomendable, también, usar prendas que permitan la transpiración
- Ir al baño de forma regular. Conviene ir al baño cada tres horas aunque no se tengan ganas para así no retener orina, salvo el momento de ir a dormir.
- Tener cuidado durante las relaciones sexuales. Es cierto que un incremento de relaciones sexuales puede favorecer una infección de este tipo, pero nunca transmitirse por esta vía. Aunque se recomienda el uso de preservativo y una correcta higiene antes y después del coito.
- Orgasmos: buenos aliados para mantener tonificada la musculatura del suelo pélvico, de esta forma, la vagina permanecerá más cerrada y protegida de posibles infecciones externas. Con una musculatura debilitada es muy difícil llegar al clímax; el ejercicio del suelo pélvico aumenta la sensibilidad vaginal, la sangre llegará más rápidamente al clítoris, erectándolo. Para asegurar una musculatura tonificada, la clínica Rozalén recomienda los archiconocidos ejercicios de Kegel y los hipopresivos, una gimnasia reprogramadora de la postura y que aporta muchísimos beneficios holísticos.
- Beber agua en abundancia. Mantener una adecuada ingesta de agua asegura un buen volumen de orina y ayuda a la eliminación de gérmenes. Por ello, no deben restringirse los líquidos en la dieta, calculando un litro y medio diario de agua aproximadamente.
- Tomar alimentos ricos en fibra. Comer frutas, verduras y productos integrales con un alto contenido en fibra contribuye a regular el tránsito intestinal y así, evitar elestreñimiento que dificulta la expulsión de bacterias.
- Un buen aliado frente a las infecciones de orina es el arándano rojo por su contenido en proantocianidina tipo A, que actúa de dos formas: elimina el E.coli a nivel intestinal e impide que el germen se pegue a la pared de la vejiga. Se recomienda tomar un comprimido por la noche, ya que es cuando se acumula más orina; en mujeres con infecciones reiterativas, se aconseja tomar un comprimido justo antes o justo después de la relación sexual.