RUBÉN TURIENZO: “DEBEMOS SER CAPACES DE APLICAR MÁS EN NUESTRO DÍA A DÍA EL NO”

El fundador de la multinacional de desarrollo de equipos WIT Performance Trainers, consultor, conferenciante y escritor Rubén Turienzo, asegura que su filosofía de vida sienta sus bases en la premisa “EARN, LEARN & HAVE FUN”, es decir, “GANAR, APRENDER Y DIVERTIRSE”. Acaba de publicar su libro Haz que suceda, un sistema de herramientas revolucionario para alcanzar tus objetivos (editorial Alienta).

El empresario incide en que no entiende su vida personal y profesional si no se dan estas tres variables: “sentirme útil, que aporto valor y que las empresas a las que acompaño crecen y se convierten en la mejor versión de sí mismas y por tanto GANAN”.

En segundo lugar, existe otra filosofía en su vida que, según explica, puede resumir en “intenta no ser el más listo de la habitación”, que va muy en línea con el APRENDER, de su mantra de vida. De este modo, opina que la capacidad de aprendizaje continuo nos hace estar abiertos al cambio y a todos los imputs que se producen en nuestro entorno.

En tercer lugar, opina, debemos DIVERTIRNOS con lo que hacemos. “Sería incoherente que vendiera eso a mis clientes y no me lo aplicara yo en su día a día”. Por tanto, coherencia y mucha diversión como elementos fundamentales para hacer de cada proyecto un momento inolvidable es otra de sus bases.

5 claves para que sucedan las cosas que se buscan en el ámbito profesional y en el personal.

Según Turienzo, las 5 claves para que se logre lo que se persigue son:

•  La primera sería entender que para ganar algo hay que perder algo. Es decir, cuando nos proponemos conseguir algo vamos a tener que sacrificar tiempo, recursos, hábitos…sin este sacrificio será imposible evolucionar. Si no entendemos esto, ante cualquier mínimo inconveniente que se nos presenta nos sentimos tentados a abandonar.
• La segunda sería definir muy bien el objetivo. Debemos identificarlo de forma muy clara y pasarle el filtro SMARTER. Es decir, asegurarnos que el objetivo es específico, medible, alcanzable, realista, temporalizable, ecológico, en definitiva, estar delante de un objetivo que verdaderamente nos motive, nos rete y nos resulte apasionante. Es la única manera de pasar de un simple deseo a una realidad con plan de acción.
• En tercer lugar, es muy importante saber elegir el momento adecuado. Aunque nos pueda parecer una banalidad, el CUÁNDO es crucial y en muchas ocasiones fallamos en su elección. No existen mejores ni peores fechas, existen momentos inadecuados para planteárnoslos. Por ello identifiquemos el momento por el que pasamos y alineemos unos objetivos acordes a esta situación vital.
• En cuarto lugar, debemos ser capaces de ir un paso más allá de lo que el resto del mundo esté dispuesto a ir. En ocasiones, abandonamos demasiado pronto. Ante una situación de bloqueo, utilicemos la creatividad y nuevas opciones que nos ayuden a alcanzar lo que queremos.
• Por último, en quinto lugar, debemos comprender que el éxito no es cuestión de azar sino más bien cuestión de hacer. Tenemos que hacer para tener y una vez tenemos, trabajar para ser. Si cambiamos este paradigma, cambiarán las cosas que nos suceden.

En su libro invita a las personas a actuar con mayor responsabilidad, integridad y coraje, pero a mucha gente le costará… ¿Qué pautas da para que sea lo más fiel posible a esta teoría? Lo primero es entender el porqué (motivos), el para qué (legado), así como los valores que son determinantes en nuestra vida y si nuestras acciones están alineadas con lo dicho anteriormente.

Cada acción que llevemos a cabo debe pasar por el filtro del “por qué”; identificando todos los motivadores que me hacen desear eso y saber cuánto de enraizado está ese objetivo dentro de nosotros. El “para qué”; el legado, lo que quiero dejar al mundo, identificar si esto que quiero me mueve o no me mueve y me hace vibrar. Por último, identificar si eso que quiero respeta mis valores y los de mi entorno, informa el experto.

Una vez realizadas estas reflexiones, conseguimos estar más anclados a estos objetivos y, por lo tanto, actuaremos con mayor responsabilidad e integridad para conseguirlos.

¿Qué hace falta para ser un buen líder hoy en día?

Para empezar, no creo en el liderazgo absoluto. Creo en el liderazgo contextual. Es decir, en un contexto determinado una persona con unas habilidades concretas podrá ejercer un liderazgo inspirador y resonante.

Si bien es cierto, existen algunos parámetros que hacen que ese liderazgo sea más versátil. Si nos encontramos ante una persona empática y que ejerce escucha activa, sin ninguna duda, estos elementos potenciarán cualquier tipo de liderazgo.

No obstante, para cualquier tipo de liderazgo debemos ser conscientes del contexto en el que nos movemos y transformar ese contexto. Normalmente el comportamiento normal es cambiar el contexto para que se adapte a nuestro liderazgo cuando lo aconsejable es justo lo contrario.

Dicho esto, la mayor habilidad que puede tener un líder a día de hoy es la capacidad de análisis del contexto en el que opera, de adaptación y de potenciación de sus habilidades para sacar el mayor provecho de sus colaboradores.

Actualmente es difícil conciliar, ¿Qué recomendaciones daría?

Pese a que no soy un experto en conciliación, sí me atrevería a decir que existe un concepto que debemos ser capaces de aplicar más en nuestro día a día y que sin duda nos ayudaría. Se trata del NO, es decir, debemos aprender a respetar nuestros horarios, nuestros tiempos, nuestro derecho a desconectar, en definitiva. Es fundamental que aprendamos a respetar nuestros descansos para no abusar de los emails, mensajes, etc., que nos hagan restarle tiempo a nuestra vida personal.

Intentemos huir de eso mensajes que se pueden estar trasladando y que viene a decir algo así como “si no estás conectado y disponible 24/7/365 es que no eres buen profesional”. Nuestra profesionalidad y eficiencia no se relacionan con cuantas horas pasamos en la silla sino más bien con la cantidad y calidad del trabajo que somos capaces de realizar.

Bárbara Fernández