Todavía estamos a vueltas con lo que podremos y no podremos hacer esta Navidad. Hay un mar de dudas respecto a si podemos/debemos movernos entre CC.AA., y será responsabilidad de cada uno el desplazarse o juntarse, se pueda o no se pueda hacer. No obstante, parece que lo más recomendable este año sería lo de «25 de diciembre, zoom, zoom, zoom»… Pero si nos planteamos contactar con nuestros familiares a través de videoconferencia, es importante que sigamos estos cuatro consejos de Víctor Gayoso, experto en ciberseguridad del centro universitario U-tad, para que la experiencia sea positiva y no nos frustre todavía más, por sobrecarga en las redes o porque «los malos» aprovechen que estamos todos conectados y con la guardia baja para intentar ‘colárnosla’ con ciberataques:
- Es importante que los dispositivos desde los que nos vamos a conectar (ya sean ordenadores o teléfonos móviles) tengan instaladas las últimas actualizaciones, tanto del sistema operativo como de la aplicación de videoconferencia que utilicemos, de forma que, si se ha descubierto alguna vulnerabilidad y ha sido corregida por los desarrolladores, nos beneficiemos de dichas correcciones.
- Debemos acceder solo a reuniones que estén organizadas por una persona que conocemos personalmente, y nunca entrar mediante enlaces de desconocidos o cuya viabilidad no podamos verificar, aunque procedan de personas cercanas, ya que podrían llevarnos a páginas que tengan malware listo para ejecutarse al acceder a ellas. Y es preferible que para acceder a la sala de reunión se requiera una contraseña.
- Solo debemos instalar aplicaciones que informen de cómo van a tratar nuestros datos personales, especialmente en el caso de las que son gratuitas. Bajo el disfraz de aplicaciones atractivas o de ocio muchas veces se esconden empresas cuyo beneficio consiste en recopilar nuestros datos y venderlos a terceras empresas. Y en el caso de las apps para móviles, desconfiemos siempre de aquellas que requieran permisos ajenos a la propia función que desempeñan (por ejemplo, una aplicación de linterna que solicite permiso para realizar llamadas o acceder a la memoria del teléfono).
El hecho de que todos al mismo tiempo queramos contactar con nuestros seres queridos puede provocar saturación en las redes, como el día de Nochevieja suele ocurrir con el WhatsApp, o hace 20 años con los mensajes SMS. Si a eso le unimos la carga de tráfico derivada de los servicios de vídeo por streaming, es posible que en algunos casos se produzcan colapsos en forma de transmisiones intermitentes o incluso imposibilidad de conectar. Por ello, sería recomendable en la medida de lo posible realizar las videollamadas antes de las cenas, en momentos de menor tráfico de internet, para que disfrutemos de un contacto a distancia satisfactorio