Llega la primavera y disfrutar del exterior se convierte en una necesidad. Las terrazas, esas grandes olvidadas durante el invierno, recuperan su protagonismo y se convierten en un pequeño oasis donde disfrutar del sol y de las horas de luz que nos brindan los días más largos de la primavera.
Grande o pequeña, todas tienen posibilidades. Toma nota de las ideas que te propone Interflora y transfórmala en el jardín con el que siempre has soñado.
¿Tienes un balcón? Mil posibilidades (¡de verdad!)
- Monta un jardín vertical, no ocupa apenas espacio y es muy lucido. Sujeta una celosía en la pared (las hay de madera o PVC) y coloca en la base unas macetas con plantas trepadoras y pequeños arbustos para que al crecer se “enreden” en la celosía. Tienes muchas para elegir, como la madreselva, la buganvilla, el jazmín o la hiedra.
- Cuelga en la pared pequeñas jardineras o macetitas (así no recargarán el espacio) o pon estanterías y distribuye macetitas de colores sobre ellas. La begonia, violeta, verbena, pensamiento o clavel llenarán de color y aroma tu terraza.
- Si realmente el balcón es muy pequeño, convierte la barandilla en un jardín a tu medida. Cuelga en ella pequeñas macetas de colores variados y verás cómo alegran el espacio. Hay plantas que crecen en forma de cascada como los potos, ficus, la planta del dinero o la petunia, que son ideales si tienes un balcón muy a la vista; refrescarán el ambiente y darán cierta privacidad.
¿Tienes metros? Monta un jardín a lo grande
- Reparte macetas de distintos tamaños y colores con plantas y flores diversas, mejor de forma perimetral para que no frenen el paso. Para macetas grandes, la lavanda o el boj son ideales.
- Divide la terraza en dos zonas y monta en una un pequeño jardín con especies que aguanten el sol como gerbera, geranios, rosales, margarita o buganvilla. Si además la decoras con canto rodado o grava, le darás un toque fresco y relajante.
- ¿Tienes un techo de cañitas o una pérgola? No pierdas la oportunidad de decorarlos con plantas colgantes como las que hemos mencionado y verás qué cambio tan natural.
- Si tu terraza es un espacio expuesto a “miradas ajenas”, nada mejor que las plantas altas como el bambú o pequeños árboles como el arce japonés, limonero o el grosellero; crean zonas íntimas y decoran.