El restaurante MÍTIKO, en la Calle Sor Ángela de la Cruz 22, pretende convertirse en el nuevo sitio de referencia de la ciudad. Detrás están Lulu Zheng y Víctor Chen, dos emprendedores que quieren sorprender al paladar de cualquiera que se acerque al local. Como nos cuentan desde el restaurante, su nombre surgió porque en el mismo lugar estuvo en 1978 uno de los primeros asiáticos de la capital, frecuentado y conocido por muchas personas de la capital y, de este modo, quieren darle una continuidad.
– ¿Cómo surge la idea de dar vida a este restaurante?
Nos enamoramos del lugar el primer día que vimos el local, era un día caluroso de Julio
cuando entramos la primera vez y nos dió la sensación de haber estado allí mucho
antes. Mi padre me solía decir que esa es una sensación de buen feng shui.
¿Por qué ahora?
Hemos visto la necesidad de tener una cocina asiática contemporánea, para satisfacer
las necesidades de todos los públicos. Para ello hemos combinado el sushi japonés más
actual y moderno con platos tradicionales el pato al estilo pekinés, todo un referente
en la comida asiática.
– ¿Y por qué Madrid?
Llevamos muchos años viviendo en esta ciudad tan multicultural, que poco a poco se
va haciendo un hueco entre las capitales gastronómicas más importantes de Europa y
del mundo. Hemos visto como los turistas que llegan a Madrid son cada vez más
exigentes en sus experiencias gastronómicas por la capital y nosotros queremos
aportar nuestro granito de arena.
– ¿Cuáles son los platos estrella que podemos probar?
Nuestro pato al estilo pekinés tiene una excelente aceptación por parte del público y
también nuestro Carpaccio de toro de atún rojo de Balfegó con emulsión de tomate y
un toque de aceite arbequina que tiene un corte perfecto al estilo tradicional japonés
¿Qué valor diferencial tiene para ustedes?
Para nosotros este proyecto no es una explotación de un negocio, queremos ir más
allá y, por eso, siempre que creamos un plato o hacemos un servicio queremos
identificarnos con ello viéndolo desde una perspectiva del consumidor y sintiéndonos
orgullosos de nuestro trabajo.
– ¿Tienen pensado abrir otros restaurantes?
Probablemente, siempre y cuando reunamos el personal necesario que comparta
nuestros mismos valores.