Bodegas Balbás, una bodega española fundada en Burgos (La Horra) en 1777 e impulsora de la DO de Ribera del Duero, y una de las más emblemáticas de esta zona, presenta la nueva añada de Pagos de Balbás.
Pagos de Balbás 2021 nace en la Finca Torrosillo, un paraje diferente y con un ambiente muy especial en el que se encuentran corzos, aves rapaces y conejos y que está rodeado de pinares bajos, con los que comparte espacio cada día. Allí́, y gracias a su clima especial, nace una uva Tempranillo de una calidad sobresaliente, que se cuida y recoge a mano para que, una vez en bodega, pase a descansar y evolucionar durante 9 meses en barricas de roble americano. El resultado de esta simbiosis es un tinto ribereño fresco y tan lleno de vida como el campo que le vio nacer.
Pagos de Balbás 2021 se elabora con una uva de excelente calidad (100% Tempranillo) a la que se somete a una maceración pre-fermentativa a 8ºC durante 14 horas para pasar a la fermentación en depósitos pequeños, espontanea, con la levadura indígena y con un control de temperatura (máximo de 24ºC). Posteriormente el vino pasa tiempo en depósito para afinarse con el frio natural del invierno.
Notas de cata
• Color: rojo purpura con notas violáceas, brillante en copa.
• Nariz: intensos aromas a frutos rojos como grosella y cereza, alguna nota balsámica. Su paso por la barrica le aporta una complejidad que ensambla perfectamente los aromas frutales con los especiados.• • Boca: paso agradable. La fruta y los taninos dulces dejan un largo recorrido. Es redondo, equilibrado y persistente.
Viñedo y elaboración
Pagos de Balbás procede de un viñedo multiclonal de uva Tempranillo situado a 840 metros de altitud. Está formado por pequeñas micro parcelas de diferentes años con suelos no homogéneos compuestos de islas arenosas rodeadas de suelos de arcillas arenosas y arcillas fuertes (astrales). La orientación y el suelo pobre hacen que sea poco productivo, teniendo la uva una excelente calidad y un carácter diferente. Es un tipo de cultivo de poca intervención con aporte orgánico natural, en el que se tiene especial cuidado de la fauna que ahí vive.
Para su elaboración se realiza una vendimia manual con un pase previo por el viñedo para retirar la uva que no es válida y asegurar, así, la máxima calidad.
Maridaje
La nueva añada de Pagos de Balbás es un vino muy versátil, perfecto para tapear, que resulta ideal con queso semicurado, pescados azules y algunas carnes blancas. También marida a la perfección con una carne roja asada como puede ser el cordero, y con setas, platos de bacalao o platos de pasta con salsa de tomate.
Recientemente ha sido reconocido con 93 puntos en los Decanter World Wine Awards, y 91 puntos por los expertos críticos de Wine Enthusiast.
Precio: 14,65€.
Línea Pagos de Balbás
Bodegas Balbás cuenta con una línea de 6 vinos parcelarios “Pagos de Balbás” que son la respuesta a la tendencia actual y a los nuevos gustos de los clientes. Son vinos muy elaborados que provienen de distintas uvas y fincas entre los que se encuentran La Retama (100% Albillo Mayor), Le Bijou Rosé (100% Tempranillo), Pagos de Balbás (100% Tempranillo), Ritus (75% Tempranillo y 25% Merlot), Ancestral (100% Tempranillo) y Alitus (75% Tempranillo, 20% Cabernet Sauvignon y 5% Merlot). Son vinos de producción limitada y cada añada tiene un cupo determinado que se agota rápidamente. Se trata de vinos únicos, con características e historias propias, que provienen cada uno de las mejores fincas de la propiedad. Todos los vinos de la bodega se elaboran según los máximos estándares de calidad.
La historia de Bodegas Balbás se remonta a casi 250 años en los que han mantenido un negocio familiar durante siete generaciones. Cuenta con una superficie de más de 160 ha de viñedos propios repartidos en varias fincas y produce y distribuye vinos con personalidad propia. Con una producción anual en torno a los 500.000 litros, sus vinos están elaborados con los más altos estándares de calidad y tienen un punto de equilibrio entre la tradición y la innovación. Se rigen por un sistema de elaboración y producción propios en los que el enólogo, Pedro de la Fuente, vinculado a la bodega desde hace más de 25 años, juega con la técnica, la elaboración y el cuidado para marcar las diferentes crianzas.