Tras las primeras semanas de vuelta a la rutina, muchos conductores se enfrentan al reto de retomar sus desplazamientos habituales. Aquí, situaciones cotidianas como ir a trabajar, llevar a los niños al colegio o ir a hacer la compra, pueden afectar negativamente al estado de ánimo. Esto puede influir en la seguridad vial y aumentar el riesgo de accidentes.
Son muchas las situaciones en la conducción que repercuten en nuestro estado de ánimo. El tráfico y los atascos son un ejemplo. Prueba de ello es el estudio que realizó la Fundación de Seguridad en el Tráfico de la AAA en los Estados Unidos, que descubrió que aproximadamente el 60% de los conductores involucrados en atascos de tráfico experimentaban un aumento significativo en los niveles de estrés.
La cantidad de tiempo que una persona pasa en el coche también puede estar relacionada con su estado de ánimo. Un estudio publicado en «Transportation Research Part A: Policy and Practice» concluyó que las personas que pasan mucho tiempo en el coche pueden experimentar niveles más bajos de bienestar. Asimismo, otro apartado de este mismo estudio examinó los efectos emocionales de conducir largas distancias y encontró que algunos conductores llegan a experimentar fatiga emocional.
Por otro lado, existen investigaciones que demuestran que conducir de noche puede ser otro factor que afecta al estado de ánimo, debido a la falta de luz y a la fatiga asociados. Estas, entre otras circunstancias como las obras, los cortes de tráfico, el ruido o las condiciones meteorológicas, pueden convertir la conducción en una tarea realmente tediosa.
Escapar del estrés de la conducción
Teniendo en cuenta que los factores que más afectan a nuestro estado de ánimo están relacionados con el tiempo y el tráfico, hay algunas recomendaciones que podemos seguir para evitar situaciones de estrés y asegurar que la vuelta a la rutina sea un poco más fácil. Parclick, aplicación de reserva de aparcamiento online, comparte algunos trucos.
- Planifica tus desplazamientos con antelación y evita las horas punta. Aunque es difícil sortear los momentos de mayor afluencia, anticiparte puede ayudarte a encontrar rutas alternativas y ver los mejores momentos para moverte. Por ejemplo, si tienes que pasar por delante de un colegio, salir 10 minutos antes o más tarde de la hora de entrada de los niños puede ahorrarte una larga espera.
- Reserva tu plaza de aparcamiento. Enfócate en lo que sí puedes controlar. Los atascos son en muchos casos imprevisibles, en cambio, sí puedes anticiparte a tener plaza de parking cuando llegues a tu destino reservando parking con la app de Parclick.
- Convierte tu momento en el coche en tiempo de ocio y no pierdas la oportunidad de escuchar tu podcast favorito, pensar dónde irás en tus próximas vacaciones o enterarte de las últimas noticias. Incluso hay personas que aprovechan para escuchar audiolibros o aprender un idioma.
- Aprovecha las ventajas de la tecnología para mejorar tu experiencia al volante manteniéndote bien informado sobre el estado del tráfico, del tiempo o del nivel de ocupación de los parkings.
- Cuida tusalud física y mental. Descansa lo suficiente antes de conducir, hidrátate bien, come sano evitando los excesos. Si te sientes cansado o nervioso, haz una pausa, escucha música relajante o haz algún ejercicio de estiramiento. Conducir en malas condiciones puede generar mayor estrés.
- Mantén tu vehículo en buen estado. Es muy común que cuando cojamos el coche vayamos con prisa, por lo que cualquier fallo técnico puede ser un importante contratiempo. Para evitarlo, lo mejor es tener todas las pruebas al día y no dejar pasar señales que puedan indicar que algo no funciona correctamente.
- Permanece alerta ante las señales de tráfico y sigue las normas de seguridad vial. Esto te ayudará a mantener una buena convivencia con otros conductores y reducir las posibilidades de cualquier incidente. Un trayecto tranquilo siempre contribuye a mantener un estado de ánimo más relajado.