Madera natural: apta para los sistemas de calefacción más punteros

¿Por qué elegir imitaciones de tipo porcelánico que emulan el acabado de madera, pudiendo elegir tarima auténtica? Varios informes garantizan su óptimo funcionamiento con el sistema de calefacción con suelo radiante. Tanto la tarima maciza como la multicapa son absolutamente compatibles, e incluso aconsejables, para la colocación de suelo calefactable.

En Jesús del Ser se esfuerzan por dar al cliente la mejor opción adaptada a las necesidades de sus proyectos. Ante la mala fama creada respecto a los problemas que conlleva colocar suelo radiante, dos informes realizados en colaboración con Uponor analizan realmente su compatibilidad con tarima maciza y con tarima multicapa.

En ambos estudios se pudieron comprobar las posibles modificaciones de dimensión y aspecto superficial (ancho y curvatura) de un suelo radiante después de realizar ensayos de potencia térmica. Los dos informes señalaron que no se detectó ningún cambio, de manera que la tarima no sufrió ningún daño superficial. Por tanto, concluyeron que la colocación de suelo calefactable con tarima tanto de madera maciza como multicapa es absolutamente compatible.

La madera, por tanto, es el material de construcción más natural, beneficioso para la salud y el medio ambiente y con propiedades intrínsecas que le convierten en el más adecuado por su comportamiento con calefacción radiante.

Gracias a su larga experiencia en el sector y su profundo conocimiento de las diferentes cualidades de cada madera, Jesús del Ser es voz autorizada para poder asesorar y recomendar las idóneas para los diferentes sistemas de calefacción, tanto los tradicionales como los más punteros (geotermia, aerotermia etc.), aportando soluciones directamente en obra.

Y no solo se trata de compatibilidad, Jesús del Ser da siete razones para apostar por la madera en el hogar:

1. Menos contaminante. Este material, que se produce en los bosques, contribuye a disminuir emisiones y transformar el CO2 en oxígeno. Su proceso productivo, con relación a otros productos industrializados, ofrece menos residuos, requiere un bajo consumo energético y respeta la naturaleza y el medio ambiente.

2. Más ligera y adaptable. La madera pesa una quinta parte que el hormigón, es mucho más ligera y silenciosa en la construcción y adaptable casi al 100% de los sistemas constructivos. En este material se pueden hallar infinitas soluciones en las edificaciones.

3. Es reciclable y renovable. Utilizar la madera es una forma de apostar por la economía circular, ya que con ella podríamos reciclar continuamente. Tiene la capacidad de poder volver a utilizarse múltiples veces y sin sobrantes de materia. Además, es 100% renovable si se práctica una tala de arboles en los bosques adecuadamente  y con los certificados pertinentes.

4. Es fuerte y resistente. A la vista de los buenos resultados que se han ido obteniendo a lo largo de la historia, mostrándonos edificios de más de doscientos años de antigüedad en perfecto estado de conservación, podemos decir que la madera es un material muy estable, fuerte y resistente. En comparación con el acero y el cemento, la madera estructural tiene una relación resistencia / peso un 20% más alta que el acero estructural y de 4 a 5 veces mayor que el cemento no reforzado en compresión.

5. Ahorra energía. El uso de la madera en el hogar supone una menor «fuga» de energía de una casa. Al ser un buen aislante del frío y el calor, en comparación con otros materiales de construcción, la madera es la opción a elegir para ahorrar en las facturas de calefacción y aire acondicionado.

6. Hay mucha variedad. La madera no es una; existen muchos derivados y se fabrican productos maravillosos. Los diferentes tipos de madera, según sus densidades, se recomiendan para diferentes usos. Hoy en día, muchos hogares lucen muebles realizados a partir de maderas recicladas, como por ejemplo pallets o tablas que son restauradas para darles una nueva vida.

7. Alivia el estrés. Es una realidad que el estrés es superior entre personas que viven en ambientes urbanos y como consecuencia, cada vez más se promueve un mayor contacto con ambientes naturales que reducen dicho estrés y promueven la relajación. De hecho, ya se han publicado varios estudios científicos que han concluido que pisar madera en el hogar ayuda a la relajación de las personas, reduce el estrés y tiene beneficios para la salud.