IMR: la regeneración capilar como solución a la caída estacional y la alopecia

Llega el otoño y con él la temida caída capilar. Es aquí, en esta época de transición, donde el estrés provocado por los nuevos proyectos, el curso escolar y los consabidos cambios juegan una mala pasada a nuestro cabello. El efluvio telógeno (o caída estacional) hace su aparición, preocupando al 72% de los españoles tal y como revela el reciente «Estudio de la piel en España» publicado por IMR, centro de dermatología de vanguardia.

Este estudio también afirma que 1 de cada 5 españoles suspende su estado capilar, ya que la nota media entre los más de 1.200 encuestados es de un 6.5. Son las mujeres, sin duda, quienes más se preocupan por esta caída estacional – un 82% – ya que como explica la Dra. Gómez alarma a quien la padece por ser más abundante y concentrada en el tiempo. Ante la duda de si se trata de alopecia androgenética, lo mejor es recurrir a sistemas de diagnóstico tan efectivos como la tricoscopia digitalizada.

Tricoscopia Digital. El diagnóstico más preciso para detectar patologías

Antes de pautar cualquier tratamiento médico se debe realizar una exploración tricológica para diagnosticar el tipo de problema capilar con el que nos encontramos, como la pérdida de densidad, el afinamiento del tallo piloso o la ausencia localizada del cabello en diferentes zonas. En IMR se sirven para ello de la tricoscopia digitalizada, una tecnología avanzada que combina la tricoscopia microscópica y macroscópica con un software de análisis y comparación de imágenes para evaluar y diagnosticar diferentes trastornos del cabello y el cuero cabelludo. Por ejemplo, la medición precisa de la densidad del cabello -crucial para identificar y monitorizar condiciones como la alopecia androgenética- o determinar la proporción de cabello en fase anágena (crecimiento) y telógena (reposo), esencial para diagnosticar diversas formas de pérdida de cabello. Por otro lado, la tricoscopia es muy útil a la hora de monitorizar la eficacia de los tratamientos, así como la medición del grosor de los cabellos individuales, lo que ayuda a identificar miniaturización del cabello, una característica común en patologías como la alopecia androgenética.

Por otro lado, la tricoscopia digitalizada permite realizar un seguimiento preciso y cuantificable de la efectividad de los tratamientos, proporcionando una evaluación objetiva del progreso y ayudando al dermatólogo especialista a realizar la pauta de tratamiento más adecuada.

Precio: 150€

Efluvio telógeno VS alopecia androgenética: principales diferencias

Mientras el efluvio telógeno no es más que una alteración transitoria del ciclo capilar que cursa con una mayor caída del cabello, y suele durar entre mes y medio y tres meses como máximo, la alopecia androgenética se caracteriza por una pérdida de densidad progresiva, explica la especialista.

Esta alopecia androgenética cuenta con una parte andro – hormonas masculinas – y otra parte genética – relacionada con los genes – que afecta a un 80% de los varones. Hablamos de una pérdida de densidad que suele darse en zonas como la frente, la coronilla o la zona media de la cabeza, dando como resultado que se transparente la piel del cuero cabelludo. El ritmo de avance, eso sí, irá determinado por los genes del individuo, que en ocasiones se celera en épocas de más estrés, señala la Dra. Alba Gómez.

¿Es diferente la alopecia en hombres que en mujeres?

Aunque tanto hombres como mujeres pueden sufrir alopecia, hay diferencias clave en cómo se manifiesta y se trata en cada sexo, explica la Dra. De hecho, la alopecia androgénica, suele progresar de manera distinta y he aquí las diferencias:

• En hombres: la alopecia androgénica tiende a seguir un patrón definido, generalmente con una pérdida de cabello desde las entradas y la coronilla, lo que finalmente puede llevar a la calvicie.

• En mujeres: El patrón es más difuso. Las mujeres generalmente no pierden cabello en áreas concretas, sino que experimentan un adelgazamiento general, lo que puede dificultar su diagnóstico.
Además, añade la Dra. Gómez, las causas hormonales tienen un impacto más visible en las mujeres, ya que factores como el embarazo, la menopausia o el síndrome de ovario poliquístico (SOP) pueden influir en la caída del cabello.

Por fortuna, en IMR cuentan con un equipo especializado de regeneración capilar con tratamientos tan efectivos como la mesoterapia farmacológica o el plasma rico en plaquetas (PRP).

Mesoterapia farmacológica vs Plasma Rico en Plaquetas: dos alternativas al trasplante capilar

Tras la tricoscopia digitalizada, explica la Dra. Gómez, pondremos en marcha recursos farmacológicos, factores de crecimiento, nutricosmética y también cuidados de la fibra capilar que intenten frenar la caída y sobre todo lograr la recuperación del cabello al 100%. Según el tipo de caída, así como el punto de densidad y grosor de los tallos pilosos del paciente, escogeremos un tipo de mesoterapia u otra: farmacológica o Plasma Rico en Plaquetas:

• Si existe un efluvio telógeno o caída estacional, los factores de crecimiento, presentes de forma natural en nuestras plaquetas, ayudarán a frenar la caída y estimular la recuperación posterior, siendo un procedimiento mínimamente invasivo que no conlleva efectos secundarios relevantes, al tratarse de nuestros propios factores de crecimiento plaquetarios.

• «Si nos encontramos con una patología capilar -añade la especialista- recurriremos a la mesoterapia capilar con activos farmacológicos que influyan en el ciclo capilar y que vehiculizaremos de forma directa a las células madre foliculares. En IMR hemos desarrollado una formulación magistral exclusiva que personalizamos en función del tipo de alopecia del paciente», concluye.

Ventajas de ambos tratamientos de mesoterapia capilar

• Efectividad: el éxito de la regeneración capilar radica en un diagnóstico temprano, un tratamiento individualizado y un seguimiento digitalizado. La mesoterapia capilar llega directamente a la raíz del folículo piloso y por eso es tan efectiva para recuperar la densidad capilar.

• Resultados duraderos: por lo general, los pacientes ven resultados entre los 3 y 6 meses. No obstante, el tiempo de respuesta puede variar, dependiendo siempre de cada paciente, el cuidado de la zona tratada y el mantenimiento de los tratamientos con el tiempo.• No requiere tiempo de recuperación: la mesoterapia es una técnica rápida y cómoda que no altera la rutina del paciente, que puede incorporarse a su vida tras el procedimiento, con total normalidad• Se puede realizar en cualquier momento del año: al no requerir cuidados especiales significativos, no limita las actividades de la vida diaria o social. Dado que hablamos de un tratamiento personalizado, permite adaptar los tiempos a los del paciente.