No nos engañemos no todos los destinos, ni todos los hoteles están preparados para que lleguemos en vacaciones con nuestros chiquitines. Si me preguntan sobre que destino elegir siempre diría que me gusta un sitio con una maravillosa playa, agua limpia, buen tiempo, pero sobre todo un lugar donde los peques puedan jugar en mil cosas diferentes, música, talleres para desarrollar su creatividad y muchas aventuras más que les mantendrán a ellos distraídos y felices, mientras tu pareja y tú podéis descansar al sol.
Menorca es un destino ideal y como sugerencia os hablaremos del Royal Son Bou Family Club situado en esta coqueta y maravillosa isla. Son apartamentos amplios y cómodos. Con un gran programa de actividades pensado para los niños, a cada grupo de edad un plan, mientras nosotros los papis podemos estar tranquilos y descansar, gracias a sus muchos animadores y su servicio de guardería durante las comidas y las cenas.
Es una construcción de estilo menorquín, que consta de un edificio principal donde se encuentra la recepción, el restaurante principal “Los Olivos” y el bar con dos terrazas. Piscina principal, el Club Kikoland y el restaurante “La Basílica”, además una piscina infantil con forma de un divertido barco pirata, sin duda hará las delicias de los más peques.
Pero ¿Qué otras cosas podemos hacer en Menorca?
-Por supuesto visitar Ciudadela y Mahón, las dos principales ciudades de la isla. Con sus plazas, sus iglesias y sus bonitas calles.
-Llevar a los niños a visitar un castillo, la Fortaleza de la Mora en Mahón. Y también conviene ver la Torre de Fornells y el Fuerte Marlborough.
-El Monte Toro, punto más alto de la isla, donde podrás ver el Santuario de la Virgen del Toro, con unas vistas estupendas de la toda la isla.
-Disfrutar de monumentos prehistóricos, como la Naveta des Tudons, el más antiguo de Europa y la Necrópolis de Cala Morell.