¿Tu pareja ha dejado de atraerte sexualmente? Esto puede poner en riesgo vuestra relación. Debes tomar cartas en el asunto si no quieres que el problema se enquiste. Debéis empezar a trabajar para recuperar la chispa cuanto antes.
Pero… ¿Por dónde debes empezar? ¿Tiene solución? ¿Es el final de nuestra historia de amor? Laura Palomares, psicóloga y directora del prestigioso centro de psicologia en Madrid, Avance Psicólogos, te descubre si es real y ofrece algunas claves para que puedas solucionarlo. cómo puedes solucionarlo
El deseo sexual varía de una época a otra y también depende mucho del estado de ánimo de cada persona. Por ejemplo, “si hay un exceso de estrés, el deseo sexual se inhibe. En ocasiones, otros motivos son hormonales o físicos y es normal que haya rachas de mayor o menor libido”, subraya la psicóloga.
No obstante, si observamos que nuestra libido es normal, no hay motivos externos que nos afecten especialmente, pero con nuestra pareja no hay atracción, debemos revisar qué ocurre.
La falta de atracción y deseo sexual hacia el otro suele provocar sentimientos de culpa que, por otro lado, “tambien influyen sobre el mismo deseo haciendo que baje. Esto dan lugar aa un círculo vicioso que trae consigo la evitación de contacto físico y afectivo y otros problemas de comunicación”, señala Palomares.
¿Qué te ha llevado a perder el interés por tu pareja?
En ocasiones, las causas son profundas: una “deuda histórica”, un enfado escondido, problemas continuados con la familia política, inseguridades personales o tabúes, pueden están detrás de ese descenso de deseo hacia la pareja.
En estos casos, la psicóloga recomienda acudir a terapia sexológica antes de que se produzca un mayor alejamiento afectivo y físico.
Tips para recuperar el deseo sexual
La comunicación entre la pareja es fundamental. Es imprescindible poner el problema sobre la mesa, con calma y objetividad y, muy importante: sin buscar culpables.
Laura Palomares, directora del centro especialista en Terapia de Pareja nos da estos consejos para intentar un acercamiento:
- Revisar si existen espacios de ocio conjunto suficientes y fomentarlos.
- Tocarse más. “La caricia genera un aumento de oxitocinas y endorfinas en el organismo, las hormonas del amor y el bienestar, y éstas siempre ayudan a fortalecer el vínculo”, expone.
- Más literatura erótica. La fantasía es la base de nuestro deseo y la literatura erótica es un potente estimulo sexual, que despertará nuestro “órgano sexual” más importante: la cabeza.
- Si las causas son profundas o la pareja no sabe cómo abordar con tranquilidad la situación y está generando discusiones, la experta sugiere “acudir a una terapia de pareja con un psicólogo especializado en sexología, con el fin de trabajar los condicionantes individuales que revierten sobre la pareja, además de las dificultades propias de la relación”.