Las ofertas de empleo globales han aumentado exponencialmente tras la pandemia. Con el auge del teletrabajo, la internacionalización de las plantillas ha tomado velocidad de crucero y eso se refleja en las entrevistas de trabajo, una prueba que cada vez se realiza más en inglés. 9 de cada 10 jóvenes españoles cree que el inglés es un condicionante para conseguir su primer empleo, según un estudio de la plataforma de live learning Preply realizado sobre 500 estudiantes, y un tercio quiere mejorar su nivel de conversación porque lo considera “muy importante” de cara a aumentar su empleabilidad.
El nivel de idioma, puro y duro, no es el único condicionante para tener éxito en una entrevista en inglés, sino que influyen otros factores como la confianza al hablarlo y saber expresar la motivación por el puesto. Al nerviosismo inherente a un desafío de estas características se le une la dificultad añadida de hablar en un segundo idioma, que no es el materno. Por eso, desde Preply ofrecen algunas claves para dar la mejor impresión en una entrevista de trabajo en inglés. Y lo hacen de la mano de un grupo de mentores de los tutores de su plataforma: Obinna Ubungwu, Karen Selik, Luis Almeida y Carrie de Sausa, expertos en lidiar con este tipo de situaciones con sus estudiantes.
1-Cuanto más simple, mejor. Al contrario de lo que podríamos pensar, no es necesario componer frases complejas subordinadas ni reproducir el vocabulario más formal para causar una buena impresión. La mejor fórmula para transmitir nuestras ideas con claridad y reflejar confianza es usar un lenguaje directo y frases cortas. “Encontrar el tono profesional adecuado en una entrevista siempre es motivo de nerviosismo, sobre todo si nos preocupa cómo expresarnos en inglés. No hace falta un vocabulario complejo para demostrar tus conocimientos de Business English. Cuanto más sencillo, mejor», explica el tutor Obinna Ubungwu.
2-Ensayar, ensayar, ensayar. Frente al espejo, con una grabadora, o, en el mejor de los casos, con un profesor de inglés. Ensayar es una de las claves del éxito. Puede ser útil utilizar un motor de búsqueda para encontrar contenidos del tipo «Las 20 mejores preguntas de la entrevista» o «Las 10 preguntas más extrañas en una entrevista», redactar las respuestas y practicar diferentes versiones con otra persona que nos pueda dar feedback. Un truco infalible es ensayar frente a un amigo o pareja y pedirle su más sincera opinión. Curiosamente, este ejercicio es más complicado con conocidos que con extraños, lo que nos favorecerá de cara a la entrevista de trabajo. La clave en este punto es el tiempo, como explica la mentora Karen Selick: “Se necesita tiempo para saber lo que se debe o no se debe decir en respuesta a estas preguntas. Luego, se necesita tiempo para fortalecer las vías neuronales para que la respuesta llegue de forma fluida y automática”.
3-Investigar a la empresa. Volvemos a Google para adentrarnos en los entresijos de la empresa, qué se publica sobre ella, sus redes sociales, su historia… Una idea excelente es buscar a tu entrevistador en LinkedIn y revisar su backgroundpara encontrar puntos en común con él y sacarlos a relucir durante la conversación. Además, podremos comprobar si habla otros idiomas más allá del inglés o si es nativo o no. En todo caso, la información puede ser crucial para mostrar interés en la empresa. «Es conveniente que, durante la entrevista, el alumno lea unas líneas sobre la empresa en la que está solicitando el empleo, incluso que memorice las palabras clave del plan estratégico de esa empresa, que las trabaje y finalmente las reproduzca de la forma más natural posible durante la conversación», desgrana el profesor Luis Almeida.
4-Respirar profundamente. Aunque pueda resultar obvio, respirar profundamente nos ayudará a enfocar las entrevistas con mejores perspectivas. No hay que temer pausar el discurso, hablar más despacio (vocalizando y poniendo el énfasis en las palabras clave, como lo hacen los nativos) y expresarnos con más claridad. Hay que evitar apresurarse en dar una respuesta y darnos tiempo para pensarla bien. Y sobre todo, no tener miedo a posibles bloqueos. Natura Evg lo tiene claro: “No te preocupes, lo más probable es que el entrevistador no sea un hablante nativo, e incluso si lo es, no será un profesor de inglés para darse cuenta de cada uno de tus errores. Así que, habla sin más».
5-Mantenerse motivado. La búsqueda de empleo puede ser una fase llena de altibajos e incertidumbre que hacen mella en el plano emocional. En este sentido, es esencial mantenerse motivado y no tirar la toalla. “Escribe ‘PUEDO HACERLO’ en trozos de papel, ponlos donde puedas verlos y repítete esto cada vez que no estés seguro de ti mismo. ¡Tú puedes hacerlo!”, aconseja la mentora Carrie de Sausa.
Una entrevista de trabajo es, nada más y nada menos, la puerta de entrada a un empleo, un evento que tiene una gran relevancia en nuestra trayectoria vital. Una buena preparación y contar con ayuda especializada, puede suponer la diferencia entre el fracaso y el éxito, especialmente si esta se lleva a cabo en inglés.
En todo caso, hay que recordar que, en muchos aspectos, una entrevista en inglés no es tan diferente a una entrevista en español. En este sentido, no hay que olvidar cuestiones básicas como vestirse cómodo y acorde a la ocasión, mostrarse cordial y sonreír y, sobre todo, mantener la calma y transmitir gran entusiasmo por formar parte del equipo. ¡Mucha suerte!